Bella Ciao, una versión "pulenta pulenta"

lunes, 26 de noviembre de 2012

¿Qué perdió Israel en Gaza?


A poco de crearse el estado de Israel un gran operativo, cuya impresionante logística no ha sido aún del todo reconocida - o quizás haya sido simplemente olvidada - trasladó a miles de judíos del norte de África hacia el recién constituido estado judío, o estado de los judíos, diferencia semántica no del todo menor.
Estos judíos, pobres de solemnidad y alejados de las corrientes principales del pensamiento judío occidental de los siglos XIX y XX pocos bienes materiales tenían consigo que pudiesen ser trasladados en tan expeditivo trance, o que valiese la pena hacerlo.
Algunos viejos rollos de la Toráh, y poco más, fuera de las esenciales pertenencias personales. Uno de estos objetos, casi infaltable en el patrimonio de cada familia, solía ser una llave.
Estas llaves, primorosamente conservadas por más de cuatro siglos ¡Cuatrocientos años! debieron abrir puertas que ya habían dejado de ser tales mucho tiempo atrás. Puertas que dejaban paso hacia jardines sombreados y rumor de agua cuidada como solo arquitectos que conocieron los desiertos pueden diseñar.
Estos judíos, de Argel y Marruecos, como tantos otros de Estanbul, Sofía o Salónica, descendían de aquellos que en el mismo año en que España llegaba a América fueron expulsados de sus hogares y su patria, la Sefarad a la que habían arribado más de mil años antes.
Más de cuatro siglos y la memoria de aquella expulsión, de aquella  abominable injusticia, pervivía en los recuerdos de estas familias, en el idioma conservado de generación en generación, en los apellidos orgullosamente españoles, también – en fin – en esas llaves.
¿Porqué motivo creen los israelíes – descendientes, algunos, de aquellos judíos – que habrían de comportarse de distinta manera los palestinos expulsados de sus hogares hace – tan sólo – setenta años?
¿Qué oscura nube se posó sobre la frente del pueblo que hizo de la memoria su verdadero culto?
¿Qué son las llaves que las familias de Gaza o Hebrón conservan y transmiten a sus nietos sino la marca de la determinación a no olvidar?
En las arenas de Gaza parece Israel haber enterrado, y perdido, los tres pilares de su existencia varias veces milenaria, y sólo cuando los recobre podrá asentar sobre ellos la paz.
זיכרון, אמת, צדק
(Memoria, Verdad, Justicia)

5 comentarios:

Mariano dijo...

Muy bueno, Udi.
Un abrazo

Ricardo dijo...

Coincido con Mariano.

Moscón dijo...

Como vos decís,la memoria.La falta de memoria se llevó puesta la vergüenza,la empatía,en fin,se llevó puesto al prójimo.

Eva Row dijo...

Cuando el pueblo judío pasó de no tener territorio ni estado propios a establecerse, perdió toda su naturaleza y dejó de ser lo que era. Lo que era se lo determinaba la condición de no tener estado.

Explico un poco más con un ejemplo:

Una empleada se queda con el fondo de comercio como indemnización por despido y pasa de empleada a patrona. Y se le ocurre ir al Sindicato para que le enseñen a ser comerciante. En el Sindicato la echan. Ella no se dio cuenta de que dejó de ser quien era, que cambió su naturaleza.

Igual con los judíos.

Javier dijo...

Me parece que eso se perdio hace mas tiempo . Igualmente me parece muy dificil retornar a la idea de un posible acuerdo con 2 estados como dice la resolucion de la ONU de 1947 . Solo veo divisiones y periodos de calma con vuelta a la violencia , gobiernos de derecha en Israel y radicalizcion de la violencia en los palestinos , me da la sensacion que hoy las mayorias en ambos lados no quieren la paz